Poblado Himba.
Difícil explicar las sensaciones cuando visitas el poblado. En primer lugar debemos comentar que los poblados de esta étnia son más numerosos más al norte, pero si lo que quieres es conocer como viven, éste es un poblado cerca de Ethosa y no obliga a desviarse demasiado.
Este poblado en teoría, es un lugar donde viven niños de un horfanato. Al llegar las sensaciones son encontradas. pagas una tarifa (20€) para poder visitarlo con un guía que te explica un poco como está formado el poblado, las costumbres respecto a la vestimenta y jerarquía, etc…
Jugamos con los niños que se animan bastante al vernos, otros han llevado las cabras a los pastos cercanos y quedan los más pequeños. Les hemos llevado algunas tonterías para jugar un poco y nos sacamos algunas fotos.
Nos enseñan las vestimentas, los estilos de peinados con arcilla o tiras de tela, las tareas de higiene personal y de repente ya está montado el mercadillo.
Precios fijos nos dicen. En dos minutos ya ha empezado el regateo. No son insistentes, ya has pagado entrada, pero bueno, alguna cosilla siempre cae como recuerdo del poblado.
Siempre me pasa que me queda un sabor agridulce en al visita a los poblados. Quiero que sean auténticos, pero sólo nuestra presencia ya enturbia de alguna manera el modo de vida. También sé que los pocos ingresos que obtienen de los turistas les ayudan a sobrevivir en un mundo cambiante y cada vez mas exigente, pero me duele pagar una tarifa ya que crea un aura de teatralidad a lo que vemos.
No obstante la visita es interesante. Aprendemos como se situa la choza del jefe frente a los animales, con un fuego entre ellos que nunca se debe cruzar (nosotros por supuesto nos despistamos y por en medio, pero somos invitados), como se divide la choza en dos, dormitorio y cocina, como el jefe tiene varias mujeres, alguna muy muy joven, y como se eliminan el olor corporal mediante el humo generado por un popurri de maderas, grasa y brasas.