Este año nos vamos a Cachemira. La idea es conocer a fondo el norte de la India, pero claro, cómo dejar de visitar Delhi y el famoso Taj Mahal en Agra cuando se pasa a tan pocos kilómetros?. Siempre alguien del grupo no lo conoce y es un lugar a marcar como «visitado» en la agenda de cualquier viajero. Ciertamente, en muchos casos ,una vez ya lo has visto ya no se tiene mucho interés en regresar, ya que las aglomeraciones de turistas, tanto internos como de todo el mundo, hacen que una experiencia que debería ser introspectiva y de contemplación de algo bello, se vuelve en contra de ella misma y finaliza siendo una batalla por la foto perfecta, o simplemente una molesta experiencia por el ruido y alboroto de alrededor. Dicho esto, sigue siendo una experiencia inolvidable y casi obligatoria.
Como la mayoría de los itinerarios en India, el nuestro comienza en Delhi. Volamos con Turkish Airlines y tras una breve parada en Estambul, llegamos a Delhi de madrugada.
Para cuando llegamos al hotel y tras desayunar de forma concienzuda pensando en tener fuerzas para un duro día en Delhi, empezamos las visitas, no estamos aún demasiado cansados, así que nos dirigimos a la Gran Mezquita de Delhi, no sin antes hacer la parada obligatoria en la Puerta de India y el Palacio del Congreso.
Jama Masjid. Es una mezquita en El Barrio antiguo de la capital, tiene varias entradas y por supuesto hay que descalzarse. A la entrada venden una especie de sandalias que nos facilitará la labor de no quemarnos lo pies con el suelo ardiente. Es interesante si no se ha visitado una mezquita con anterioridad, es tranquila, y se puede ver a menudo personas orando.
En la misma entrada hay varios rickshaw, que por unas 20 rupias cada uno nos permitirán dar una vuelta por El Barrio, viendo los mercados y puestos de especias. Si estáis interesados en comprar canela, pimienta, cardamomo, azafrán y por supuesto curry. Este es el lugar!
Tras la visita que no lleva demasiado tiempo, nos encaminamos hacia la Tumba de Humayun. En esta caso debo decir que me parece una visita imprescindible. Es una zona ajardinada, repleta de ardillas y muy tranquila, con varias tumbas alguna de ellas espectaculares. No encontrareis demasiados turistas y os podréis perder por los jardines, no os lo perdáis.
Finalmente visitamos el mausoleo de Ghandi. Sinceramente no vale mucho y el sol es abrasador en este lugar y hace que el suelo arda a no ser que os ocurra como a nosotros que nos llovió de forma torrencial antes de llegar y entonces lo acabas con los pies mojados, pero como pasar por alto a este gran pensador.
Ya el cansancio se nos viene encima, por lo que nos volvemos al hotel a tomar una ducha y descansar. Nos alojamos en el Lalit Hotel. Un muy buen hotel y que para el primer día en la India consigue relajarnos con su piscina y sus habitaciones magníficamente equipadas. Aunque debemos decir que su bar a 8 euros la cerveza nos parece un poco excesivo, pero sinceramente, tenemos necesidad así que caemos en la trampa.
Tras un poco de descanso dando un paseíto nos dirigimos a Connaugth Place. Es una zona de Tiendas en circulo que para orientarse han tenido la magnífica idea de nombrar las manzanas con letras consecutivas. Aquí podremos encontrar multitud de restaurantes, tiendas de marcas internaciones, tiendas de souvenirs, oficinas de cambio, y por supuesto multitud de tunantes que te quieren convencer que estas en el lugar equivocado y que ellos te acompañan a algún centro comercial o tienda que casualmente regenta un familiar.
Tras una magnifica cena ya volvemos al hotel a descansar. Mañana tomamos el vuelo a Leh muy temprano y estamos un poco nerviosos ya que nos han dicho que a veces es un poco movido.